Las relaciones entre Roma y Bruselas nunca han sido tan cruciales para determinar el futuro de la economía de Italia. Las próximas elecciones europeas son clave mientras el país se prepara para negociar con la UE los términos de su senda de ajuste fiscal.
PUBLICIDADSegún la oficina de estadísticas de Italia, el país se ha convertido en uno de los de mayor desempeño entre los grandes Estados europeos en los últimos cuatro años.Aunque el giro positivo de los acontecimientos no ha puesto fin a su largo estancamiento económico.
Valentina Meliciani, directora del Instituto Luiss de Análisis y Política Europea ('LEAP', por sus siglas en inglés), analiza la situación: "Si consideramos la perspectiva a medio y largo plazo, retrocediendo hasta los años 90 y teniendo en cuenta el volumen de negocio de las empresasy el crecimiento del PIB y los niveles de productividad del país, nos damos cuenta de que el índice de crecimiento de Italia está por debajo de la media europea", sostiene.
Sin embargo, ofrece motivos para un moderado optimismo, al tiempo que pide cautela: "Recientemente hemos observado que las empresas reaccionan positivamentetras la pandemia, demostrando su capacidad para responder al shock. No obstante, este último acontecimiento también parece desvanecerse", dice Meliciani.
Italia espera crecer un 1% en 2024
El Gobierno italiano ha pronosticado que el crecimiento del país estará en el entorno del1% en 2024. Una predicción mucho más optimista en comparación con la de la Unión Europea.
Además, tanto la pandemia como los últimos acontecimientos geopolíticos han afectado a la producción industrial. Las empresas que operan en diversos sectores, incluido el energético, se han enfrentado a una serie de desafíos.
Giulio Natalizia, de Natalizia Petroli SpA, relata la sucesión de eventos: "En primer lugar, sufrimos la pandemia, que provocó una reducción del 20 % en nuestra facturación. Logramos recuperarnos bastante bien. Pero luego, en 2022nos impactó la guerra entre Rusia y Ucrania, que alteró significativamente la regulación del sector y las ventas de productos petrolíferos. Sin embargo, este evento también aceleró los cambios en el sector, preparándonos para enfrentar los desafíos del mercado global".
Los empresarios se reunirán con los candidatos electorales antes de los comicios para debatir un documento publicado por la principal asociación industrial de Italia, Confindustria, sobre cómo mejorar la competitividad en Europa.
El Gobierno de Meloni cuenta con el gasto de los consumidores y el estímulo del Fondo de Recuperación de la UE para impulsar el crecimiento. El Ejecutivo prometió además un enfoque mucho más cauteloso en torno al gasto público para cumplir con la última reforma de las reglas fiscales del bloque comunitario. Pero el déficit presupuestario probablemente no se situará por debajo del límite del 3% de la UE al menos hasta 2026.