El primer ministro Narendra Modi ha prometido que la ley castigará a los culpables, tras meses de violencia interétnica en el estado de Manipur.
Violencia étnica en La India. El primer ministro Narendra Modi rompe por fin su silencio ante la ola de ataques en el estado de Manipur, al noreste del país, que han causado más de 130 muertes desde mayo.
Abuso sexual contra dos mujeres kukis
El vídeo de dos mujeres obligadas a caminar desnudas entre decenas de hombres que abusaban de ellas, publicado este miércoles en redes sociales, ha provocado la ira entre ciudadanos, políticos y jueces.
El incidente de Manipur es una vergüenza para una sociedad civilizada, ha dicho. Modi ha prometido que la ley castigará a los culpables con toda su fuerza. "Lo que ha pasado a las hijas de Manipur no podrá ser perdonado nunca", sentenciaba.
El ataque contra las mujeres de la etnia kuki se produjo el cuatro de mayo, un día después del estallido de la ola de violencia a raíz de una protesta de grupos kukis cristianos contra la petición de los meiteis, de mayoría hindú, de un estatus especial que les permitiría comprar tierras en las colinas donde viven ellos y acceder a empleos públicos.